Desratización

Es la acción que tiene por objeto la eliminación de roedores (principalmente ratas y ratones) de un determinado ambiente mediante métodos de saneamiento básicos, mecánicos o químicos. La desratización puede ser concebida desde dos aspectos diferentes:

• Desratización pasiva. Se define como la aplicación de técnicas defensivas que impidan que los roedores penetren, vivan y proliferen en locales o instalaciones. Son medidas de prevención, en las cuales no es necesaria la presencia humana directamente, orientadas a la modificación de las condiciones ambientales con objeto de prevenir y limitar la expansión de dichas especies.
• Desratización activa. Son métodos más agresivos contra los roedores que los anteriores y van encaminados a la eliminación de los múridos. Estos métodos están dirigidos a controlar la población de roedores que actúan directamente por mediación humana. Entre ellos esta la aplicación de sustancias, en su mayoría ofensivos, de tipo físico, químico y biológico. El fin de estos métodos es alterar el correcto funcionamiento del metabolismo del roedor.

Todas las actuaciones de Tecnicontrol están garantizadas y se realizan con productos aprobados por el Ministerio de Sanidad. A su vez, estas actuaciones están supeditadas a la elaboración de un plan de desratización que sigue una serie de pasos lógicos, los cuales proporcionan información acerca de las causas y soluciones al problema que se plantea.

Desinfección

Se trata de una técnica de saneamiento cuya finalidad es la destrucción de los microorganismos patógenos (bacterias, virus y hongos), en todos los ambientes en que puedan resultar nocivos, utilizando para ello agentes fundamentalmente químicos.

La importancia de la desinfección radica en que con ella se trata de mantener los niveles de contaminación microbiana dentro de los límites considerados aceptables, desde el punto de vista teórico-sanitario, todo ello en función del riesgo que representa en cada caso sobre la actividad que se realiza en un lugar determinado. La desinfección es altamente recomendable en colegios, hospitales, granjas industrias alimentarias, etc.

Desinsectación

El término desinsectación se refiere al conjunto de técnicas y métodos dirigidos a prevenir y controlar la presencia de ciertas especies de artrópodos nocivos en hábitat determinado. Aunque en sentido espúreo el término se refiere al control de insectos, éste engloba a otras especies, fundamentalmente arácnidos y crustáceos, cuyas características básicas son: invertebrados, con el cuerpo segmentado, dotados de exoesqueleto quitinoso, apéndices articulados en número par y reproducción sexuada.

La desinsectación debe de ser metódica, siguiendo un plan preestablecido, científica, utilizando los productos más eficaces, completa y no uniforme, ya que para cada artrópodo se debe elegir el insecticida más adecuado y los métodos de actuación más duraderos. También se deben valorar si queremos un efecto duradero, persistente, residual o un efecto inmediato, pero poco duradero, como sería el caso de destruir insectos voladores.

Teniendo en cuenta todo lo anterior, la ejecución de los tratamientos serían ejecutados según las necesidades existentes en cada periodo climático. Hay varios procedimientos que nos llevarán a conseguir el mejor control posible:

• Procedimientos mecánicos. Consisten en la colocación de barreras físicas que impidan la llegada de los insectos a las personas.
• Procedimientos químicos. Las sustancias químicas que se emplean para destruir los antrópodos reciben el nombre de insecticidas. Estas sustancias químicas producen por contacto, ingestión o inhalación la muerte de las larvas, ninfas o insectos adultos de muy variadas especies, de manera rápida.